09-04-2009

“Vías Venosas Centrales en Niños bajo Visión Ecográfica en Tiempo Real”

Finalizada la presentación, la opinión de los presentes fue unánime: el trabajo de investigación realizado por el equipo de anestesiología de la Clínica Dávila, presentado en la reunión mensual de la SACh, por las doctoras Mariela Agurto y María Luz Rubio, fue de gran aporte y calidad.

La investigación presentada se centró en la utilización de la ultrasonografía para instalar vías venosas centrales, de modo de reducir las complicaciones y el porcentaje de fracasos existentes con el método tradicional. De esta forma, gracias al uso del ecógrafo para ubicar la vía venosa a puncionar, se pasó de una tasa de dos intentos de punción a uno, con un 94% de éxito.

La idea de practicar en pacientes, principalmente en infantes, esta nueva modalidad surge de la experiencia vivida por el Doctor Castro, del Servicio de anestesiología de la Clínica Dávila, quien vio la utilidad de este método en un workshop de la ASA en el que participó. Posteriormente, viajó a España para perfeccionarse más en esta técnica, para luego volver a Chile a implementarla.

Así, es como en septiembre de 2007 se establece esta metodología en las guías clínicas, como la forma en la que hay que proceder para instalar las vías centrales en pacientes pediátricos. Hasta la fecha, los anestesiólogos de la Clínica Dávila han realizado 285 instalaciones, de las cuales un 21% corresponden a niños menores de 15 años.

En cuanto a los resultados obtenidos en este estudio, ambas doctoras expusieron que el éxito de esta nueva técnica fue casi de un 100%, dentro del cual el 62% de las punciones se realizaron en un intento y sólo se presentaron 3 casos de complicaciones, lo que equivale a un 5.1%.

En conclusión, la instalación de vías venosas con la ayuda del ecógrafo se tradujo en un triunfo, no sólo porque permite realizar esta maniobra con mayor facilidad y certeza, sino que porque también redujo considerablemente la tasa de complicaciones y el tiempo que tomaba realizar la punción en comparación con el método tradicional.

Si bien las doctoras Rubio y Agurto reconocen que aún queda por investigar, quienes fueron parte de este trabajo y el servicio de anestesiología de la Clínica Dávila coinciden en que se avanzó en esta área, obteniendo muy buenos resultados, siempre con el objetivo de brindar la mejor atención a los pacientes.

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