28-11-2011

Posición del Directorio de la SACh Respecto del Conflicto entre Anestesiólogos Residentes en Puerto Montt y la Clínica Los Andes

El Directorio de la Sociedad de Anestesiología de Chile ha decidido informar a sus asociados su posición respecto del conflicto generado entre los anestesiólogos residentes en Puerto Montt y la Clínica Los Andes de la misma ciudad. Esta posición se refiere a una situación que fue comunicada al Directorio por los anestesiólogos de esa ciudad, varias conversaciones con los doctores Víctor Ortuvia y José Tamblay, y una comunicación con el Gerente de la Clínica.

De acuerdo a esos antecedentes, el Directorio de la Clínica Los Andes contactó, hace 3 semanas, al Dr. Luis Berr (cardiocirujano, residente en Santiago) y le expuso algunos problemas de esa entidad con los anestesiólogos residentes en Puerto Montt.

Con esa información, el Dr Berr habría solicitado la intervención del Dr. Víctor Ortuvia Álvarez, anestesiólogo residente en Santiago.

El Dr. Ortuvia concurrió, junto al Dr José Tamblay Postestad (también residente en Santiago), para prestar atención anestesiológica en RNM a pacientes de esa clínica. Juntos realizaron 17 RNM en un fin de semana.
Los anestesiólogos de la ciudad quedaron muy sorprendidos con esa conducta, pues sus razones para no atender a los pacientes de esa clínica eran estrictamente profesionales: la falla del monitor de signos vitales para RNM, cuya reparación duró varios meses; la ausencia de carro de paro en área adyacente al resonador; y la imposibilidad de cubrir en forma exclusiva esta prestación en horario de Hospital, por la colaboración público-privada existente entre la Clínica y el Hospital base. Además, ellos han manifestado que desconocían que esta actividad generaba honorarios para el anestesiólogo y, por lo tanto, desde esa instancia ofrecieron sus servicios para RNM.

En las semana siguiente, concurrió a Puerto Montt a realizar las prestaciones la Dra María Eugenia Mellafe M, anestesióloga residente en Santiago, quién se habría entrevistado con algunos de los anestesiólogos locales para solucionar algunos de los déficit de atención descritos por la administración de la Clínica y que obstaculizarían el proceso de acreditación.

Más tarde, el Dr Víctor Ortuvia fue nombrado "Coordinador de Anestesia Institucional", para organizar y supervisar la práctica en la Clínica de los anestesiólogos locales. Esa decisión provocó que éstos, masivamente, abandonaran toda actividad anestesiológica en dicho recinto, concentrándose solamente en la atención del Hospital base.

Así las cosas, desde el 10 de noviembre del año 2011, la Clínica Los Andes de Puerto Montt cuenta con anestesiólogos que viajan desde Santiago y cumplen jornadas ininterrumpidas de 24 horas a disposición de su empleador (durante siete días consecutivos). Ese sistema de trabajo ha sido creado, organizado y supervisado por el Dr. Ortuvia, quien sigue residiendo en Santiago.

Desde el 15 de noviembre, los traumatólogos locales abandonaron su práctica privada en dicha clínica. Desde esa fecha, han concurrido a esa ciudad otros 4 colegas contactados por el Dr. Ortuvia.

Recientemente, algunos anestesiólogos de Puerto Montt fueron informados que las anestesias serán administradas sólo por los médicos institucionales contratados por Clínica Los Andes en las condiciones ya descritas.

Ante esta situación, podemos comunicar a los anestesiólogos de Chile nuestra posición:

1.- Situaciones similares a ésta se han producido recientemente (Calama, 2010). En ese caso, la mediación del Directorio de SACH permitió que finalmente los anestesiólogos residentes negociaran con las instituciones involucradas y trabajaran en condiciones ajustadas a la ley laboral vigente, respetando la libre elección de los personas y cumpliendo la lex artis que obliga a atender pacientes sólo cuando el operador se encuentra en condiciones para trabajar en sus mejores condiciones físicas y psíquicas.

2.- Como sucedió en Calama, parece muy improbable que los anestesiólogos llamados a estos servicios trasladen su lugar de trabajo y residencia a provincias, por lo que esta intervención no parece una solución seria o definitiva a problema alguno. Su adhesión sólo constituye un atractivo ingreso esporádico, que puede generar o empeorar conflictos completamente indeseados y evitables. Cabe destacar que, en el sistema económico actual, la instancia correcta para resolver conflictos entre prestadores y pagadores es la negociación realista, adaptada a las realidades locales, sin hacer escarnio de la ley laboral vigente ni de la seguridad de los pacientes.

3.- Considerando el sistema de libre mercado vigente en nuestro país, sólo cabe plantear que: cada anestesiólogo que reciba ofertas potencialmente conflictivas, sea por conflictos gremiales o por ejercicio profesional en condiciones extremas o de aislamiento, debería mantener una conducta acorde con la dignidad de la profesión, incluyendo el respeto a los colegas y a la seguridad de los pacientes, por encima de los intereses económicos de corto plazo, por muy respetables que ellos sean.

4.- Los 2 últimos Directorios de SACH han enfatizado la práctica de la especialidad de acuerdo a estándares de calidad consensuados a nuestras diferentes condiciones regionales. Estas normas han sido socializadas con anestesiólogos a lo largo de todo el país, en 16 reuniones entre colegas de Santiago y anestesiólogos locales:

4.1. Si se producen faltas a esos estándares, deben ser los residentes en dichas localidades quienes den solución en los centros públicos y privados a los que concurren (porque sólo ellos cuentan con información completa y actualizada, redes de apoyo y permanencia física para ir enfrentando el dinamismo propio de las atenciones sanitarias).

4.2. Si es necesaria mediación, debe darse en el ámbito de las buenas prácticas médicas y de la cortesía en las relaciones interpersonales, pues los resultados de otras improvisaciones han sido adversos para todos los involucrados, para la imagen de la especialidad y para la seguridad de los pacientes.

4.3. Ninguna consideración económica puede hacer virtuoso el ejercicio profesional de la anestesiología en condiciones de precariedad material o física, por lo que cada oferta de trabajo debe ser evaluada en términos mucho más amplios que el monto involucrado.

Directorio SACH

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