17-01-2006
Prevenir, detectar y contribuir a sanar patologías de vieja data en el mundo médico pero no siempre reconocibles por los propios afectados, como la adicción a fármacos y otros problemas asociados, es el objetivo del nuevo comité de nuestra sociedad. El director del organismo explica en estas líneas la experiencia del proyecto y las formas en que éste operará para llegar a cada servicio del país.
Tres años de estudio sobre patologías sufridas por nuestros médicos durante el ejercicio de la profesión, son los que lleva ya el Dr. Juan Pablo Acuña B., del Hospital San José. Su preocupación nació tras observar la repetición de males relacionados con ciertas adicciones a fármacos en las que caían profesionales de la salud, empujados principalmente por el estrés laboral. Fue así como tras adquirir una base teórica sobre el tema se puso manos a la obra para formar un comité que actuara como organismo difusor del problema y que, además, ofreciera posibilidad de tratamiento y protección o reinserción laboral a los afectados.
“Profundizando en el tema –señala- hemos entendido que se trata de un problema a nivel mundial, y que en países desarrollados hace ya más de 30 años se comenzó estudiar y tratar esta enfermedad”. En ese sentido, explica que “a medida que constataba la reiteración de este tipo de enfermedades, también iba entendiendo que existían complicaciones que ni mis colegas ni yo conocíamos, así como procedimientos para nosotros nuevos, y que nos han servido para detectar a tiempo adicciones sufridas por algunos de nuestros pares”.
El Dr. Acuña menciona la sobredosis, e incluso el suicidio como los más graves desenlaces a los que pueden verse enfrentados los especialistas que no son tratados oportunamente. Al respecto, el profesional señala que “quisimos actuar en forma abierta, fomentando la educación y prevención, y para esto le dimos vida al Comité de Salud Ocupacional, ente que contó con la aprobación de la actual presidente de la Sociedad de Anestesiología de Chile, Dra. Silvana Cavallieri y que fue constituido oficialmente el 25 de noviembre de 2005”.
Todos estos esfuerzos, sin embargo, no tendrían mucho valor si es que los distintos especialistas que se vean afectados por adicciones y problemas relacionados, no acuden al nuevo comité. “El objetivo es que nuestros colegas (socios o no socios), sepan que pueden contar con nosotros en caso de verse afectados ellos u otros profesionales cercanos, dejando de lado prejuicios y miedos al posible daño de imagen al interior de la especialidad o en el entorno social”, explica el Dr. Acuña, quien está acompañado en esta nueva labor por los Drs. Carla Pellegrin F. y Juan Pablo Álvarez A., ambos también del Hospital San José.
-¿Aparte de orientarse al tema de las adicciones, el nuevo comité ha estudiado sobre otros tipos de enfermedades que pueden contraerse en la medicina?
-No. Así partimos y es el tema que más conocemos, sin embargo la Dra. Cavallieri nos propuso extendernos a otras patologías, como el estrés laboral, todas las complicaciones infectocontagiosas por accidentes cortopunzantes o por vía aérea, o los daños causados por exposición radiológica. Sin embargo, las adicciones es el tema en el que más avanzados estamos y más estudio tenemos.
-¿Cómo opera el comité para llegar a todos estos profesionales afectados?
-En el caso de las nuevas enfermedades incluidas recién nos estamos documentando, por lo que el modus operandi aún no ha sido definido, sin embargo en el área de las adicciones ya hemos organizado charlas en distintos servicios de anestesiología como en conferencia del curso postgrado en Anestesiología del Departamento de Anestesiología y Reanimación de la Universidad de Chile.
-¿Qué tipo de información relacionada con adicciones se dicta durante las charlas?
-Nos preocupamos de dar a conocer datos sobre la fisiopatología de la enfermedad, su prevalencia, modos de conocer cuando algún colega está siendo víctima del problema y qué hacer si en el servicio de uno se sabe sobre gente afectada. Hacer conciencia en la comunidad de todo el personal de pabellón que éste es un problema real que se pueden prevenir y detectar a tiempo las complicaciones y que es necesario implementar estrategias eficaces de manejo de estupefacientes. Finalmente que es un riesgo inherente al la especialidad. También se destaca la posibilidad de reinserción laboral.
-Cuando Ud. nos habla de médicos insertos en una adicción, cuesta entenderlo, pues se piensa que un especialista sabe qué es lo que se está administrando.
-Primero que todo el problema no sólo afecta a los médicos, sino también a todo el personal de la salud. Por otra parte, si respondemos a esa aseveración, los colegas sí conocen las consecuencias del uso de determinados fármacos, pero estas conductas son tan irracionales como las de quienes se hacen adictas al alcohol, sabiendo lo nocivo que es su uso sistemático y reiterado. Esto es parte de la enfermedad adictiva.
Enfermedades Profesionales
Según explica el Dr. Acuña, actualmente se está dando los pasos necesarios para que en el momento que al Ministerio de Salud le corresponda renovar el listado de las que para dicha cartera son enfermedades profesionales, y que por ende tienen derecho estatal a protección, tratamiento, seguro de estabilidad o reinserción laboral, se tomen en cuenta las afecciones que el Comité de Salud Ocupacional ataca actualmente. Esta decisión se tomará dentro de tres años más, período que el nuevo organismo cree suficiente para lograr un objetivo que, además, reforzaría las posibilidades de ayuda real hacia quienes sufren de males inesperados. “El Ministerio de Salud español y la Sociedad Española de Medicina hicieron un convenio en el que se consideraba a todas las enfermedades adictivas, para incluirlas en un plan serio de salud ocupacional, en la que se convinieron y concretaron las que hoy son nuestras metas. Ése es el camino que debemos seguir”, señala.
Si bien el Dr. Acuña reconoce que las adicciones contraídas en el ambiente laboral equivalen sólo alrededor 1% de los profesionales y trabajadores de la Salud, a nivel mundial, comprende muy bien que la gravedad de las patologías es la principal preocupación a la que hay que destinar los esfuerzos. Al respecto explica que “quizás no es mucha aún la gente afectada de la que, al menos, tenemos información, sin embargo sabemos que sus adicciones llegan a ser muy dramáticas, tanto para la persona y profesional, como para la familia, el entorno laboral y, en la minoría de los casos, los pacientes”.
-¿En relación a los pacientes, de qué forma son ellos protegidos de lo médicos que sufren este tipo de enfermedades?
-Siempre se protegerá al paciente, pues incluso para el médico bajo adicción realizar de la mejor forma posible su profesión es fundamental para la autoestima. Quizás puede sacrificar la vida familiar, relaciones laborales, etc., pero siempre intentará afirmar su autoestima en el trabajo, con sus pacientes, por lo que el desarrollo óptimo de su profesión seguirá siendo su prioridad.
-En relación al tema de la autoestima e imagen profesional, ¿ha notado la predisposición de los afectados a dar a conocer sus casos?
-No es mucha de parte de los afectados. Eso sí, desde que estoy a cargo ya he tenido conocimiento de casos dados a conocer no por los mismos enfermos, pero sí por colegas cercanos a ellos. Quienes nos dieron aviso, antes ya habían participado en algunas de nuestras charlas por lo que les fue más fácil darse cuenta del problema en que comenzaban caer otros profesionales del mismo servicio. En estos casos, además, los resultados han sido positivos, pues se ha logrado ayudar a frenar el problema a tiempo evitando las complicaciones más graves, y a intentar reintegrarlos a sus labores como anestesiólogos.
El Comité de Salud Ocupacional tiene como uno de sus objetivos durante el presente año formar monitores en cada servicio de anestesiología del país para hacer más efectiva la difusión del proyecto. “La idea es que ellos adquieran los conocimientos básicos sobre qué hacer ante la presencia del problema al interior de sus unidades, así como los métodos más eficaces de control de fármacos adictivos”, explica. El especialista agrega que ""es fundamental ser muy estrictos en el manejo de estupefacientes dentro de pabellón, especialmente en las medidas de control y auditorías rutinarias, entre muchas otras medidas”.
El trabajo, reconoce el Dr. Acuña, aún está en proceso y es imprescindible para su éxito final seguir insistiendo en que el problema adictivo, y así también otros males relacionados, está presente en la medicina tal cual lo está en la sociedad. Eso deben entenderlo quienes sufren la enfermedad y, por ende, necesitan de un apoyo especializado, así como también todos nuestros profesionales. De esta forma se logrará dar a tiempo el alerta de problemas que más tarde pueden convertirse en espirales sin retorno.
*Para comunicarse con el Dr. Juan Pablo Acuña en caso de la necesidad de ayuda especializada del Comité de Salud Ocupacional, llamar al teléfono 09 579 19 39, o dirigirse a los siguientes correos electrónicos: juanpablo.jab37@gmail.com - jab37@mi.cl